La Cantada de Habaneras atrae todos los años a multitud de espectadores a Calella de Palafrugell, en la Costa Brava. Por encargo del Instituto de promoción económica de Palafrugell, NUSSLI construye las infraestructuras temporales de este evento desde 2010 un tanto especial: el escenario, de 140m², se montó sobre las rocas y en algún lugar incluso sobre el agua. El graderío, con 1.489 localidades para espectadores, se colocó en la playa y entre las casas del pueblo.